Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

II Samuel 19, 30-36

30 El rey le dijo: «¿Para qué vas a seguir repitiendo tus palabras? He
decidido que tú y Sibá os repartáis las tierras.»

31 Dijo Meribbaal al rey: «Y aun todo puede llevárselo, ya que mi
señor el rey ha vuelto en paz a su casa.»

32 También Barzillay de Galaad había bajado de Roguelim y había
pasado el Jordán con el rey para despedirle en el Jordán.

33 Barzillay era muy anciano; tenía ochenta años. Había
proporcionado alimentos al rey durante su estancia en Majanáyim, porque
era un hombre muy rico.

34 Dijo el rey a Barzillay: «Sigue conmigo y yo te mantendré junto a
mí en Jerusalén.»

35 Pero Barzillay dijo al rey: «¿Cuántos podrán ser los años de mi
vida para que suba con el rey a Jerusalén?

36 Ochenta años tengo. ¿Puedo hoy distinguir entre lo bueno y lo
malo? Tu siervo no llega ya a saborear lo que come o bebe, ni alcanzo ya a
oír la voz de los cantores y cantoras. ¿Por qué tu siervo ha de seguir siendo
una carga para el rey mi señor?